top of page

Rivas da el pistoletazo de salida a los festejos taurinos en Aragón

  • Redacción
  • 7 ene
  • 2 Min. de lectura
Foto: Ricardo Canales (Facebook)
Foto: Ricardo Canales (Facebook)

RIVAS (Zaragoza) A.S. - Con la llegada del nuevo año, comienzan ilusiones renovadas y la temporada taurina aragonesa. Como ya es tradicional, la localidad de las Cinco Villas de Rivas es la encargada de celebrar las primeras sueltas de reses de la comunidad autónoma y de la provincia de Zaragoza.


La tarde de Reyes, antes de la llegada de sus majestades, se pudo disfrutar de una suelta de vacas por parte de la ganadería navarra de Ustarroz. Como es habitual, se congregaron multitud de aficionados venidos de toda la provincia y comunidades limítrofes para disfrutar de la tarde. Para comenzar la sesión, se soltaron varios añojos para los más jóvenes y así fomentar la afición entre ellos, donde se pudieron ver recortes, quiebros y entradas al roscadero por parte de las reses.


Tras la suelta de becerros comenzó la suelta de vacas, en relevos de dos en dos. La tarde estuvo marcada por la gran afluencia de participantes con roscaderos que pudieron disfrutar de numerosas entradas de las reses, cogidas y algún que otro susto (por suerte sin graves consecuencias). También se presenciaron recortes y momentos de tensión en la zona de la fuente, con el salto del muro por parte de alguna de las vacas participantes en la tarde que puso en peligro a los que allí se encontraban.


El lunes 6, día de Reyes, la afluencia de público bajó respecto a la del día anterior, así como la de participantes que se encontraban en el recorrido. De nuevo, dos relevos de becerros comenzaron la tarde para crear afición entre los jóvenes que se animaron a recortar y echar el roscadero a los de Ustarroz. Durante la segunda tarde se pudieron ver animales veteranos que sabían estar en la calle, complicados para la suerte del cesto, así como para recortar. Estas reses fueron combinadas con vacas más jóvenes que se emplearon a fondo con los roscaderos dejando grandes entradas cuando eran cogidas de largo, haciendo volar a los componentes de los palos y tirando al suelo a más de una cuadrilla que se midió a ellas.


También hubo alguna res que se coló en el roscadero, pero rápidamente fue cogida para evitar males mayores, y sustos sin consecuencias que hicieron que todos los aficionados llegados a Rivas disfrutaran de una entretenida tarde de vacas. Para finalizar, se soltó parte del lote exhibido durante la tarde que fue aplaudido al pasar a los corrales.

bottom of page